nonimo
 
  Home
  Contacto
  SERIE: nuevo mundo
  SERIE: Pivcity
  FANFIC: Dimension A-I-E
  => CAPITULO 1: UN LUGAR EXTRAÑO
  => Capítulo 2: Respuestas
  => Capítulo 3: De vuelta a la escuela, que injusticia.
  => Capítulo 4: Arrepentirse no es una opcion.
  => Capítulo 5: Amistades
  => Capítulo 6: ¿Qué es lo que esta sucediendo?
  => Capítulo 7: Sin miedo
  => Capítulo 8: Reencuentro con lo sobrenatural
  => Capítulo 9: Cambio de ideas
  => Capítulo 10: Cazando al cazador.
  => Capítulo 11: Aveces lo mejor es mentir
  hoja informativa
Capítulo 7: Sin miedo
 

Ella lentamente giro su cabeza para verme con un rostro que mostraba una mayor agresividad, se puso en una posición firme, y entonces sucedió algo que en verdad me dejó boquiabierto, en su cabeza aparecieron orejas y tras ella una cola parecida a la de un perro.

“¿Qué carajo está pasando aquí?, ¿a esa mujer le salieron orejas y cola de perro?”

Sabía que me encontraría con personas poderosas en este mundo pero nunca se me vino a la mente que vería criaturas irreales, un sentimiento de impresión combinado con miedo empezó a rodearme pero logré liberarme de eso al ver aquella mujer o lo que sea que fuera venir corriendo hacia mí, no tenía ninguna intención de quedarme parado mientras dejaba que me golpearan así que me preparé para pelear, al estar a corta distancia de mí aquella mujer empezó a lanzarme golpes mientras yo los esquivaba , gracias a mi habilidad que me permitía ver sus movimientos antes de que pudiera realizarlos y así lograba evitar sus golpes aunque con gran dificultad, sus puños y patadas no me alcanzaban pero cada vez que los lanzaba llegaba a rozar mi piel, esa mujer era mucho más rápida y fuerte que un humano normal y por eso no podía intentar bloquear ya que mi brazo quedaría mucho pero de lo quedo el poste que fue golpeado por aquella desconocida, tampoco me dejaba oportunidad de hacer un contraataque.

Solo me quedaba retroceder pero ella no me daba ni un minuto de descanso, en ese momento recordé que podía crear objetos de la nada, y me Dije a mí mismo.

“Si no puedo vencerla con mis puños entonces no me queda otra que usar armas”

No tenía mucho tiempo para pensar por lo tanto tenía que conseguir objetos resistentes pero simples para que no me tomara mucho tiempo convocarlos, ella venia hacia mí preparando su puño para lanzar un golpe y entonces puse mi brazo izquierdo enfrente, tras mi brazo estaba la palma de mi mano derecha abierta e intentando recordar lo que me dijo Hiroto intenté crear una rodela de metal en mi brazo lo más rápido que pude.

Esa mujer llegó a impactar mi brazo, el cual estaba protegido con una pequeña rodela de metal,  sentí un algo de dolor con el pequeño sacudimiento que tuvo mi brazo pero gracias a que me curo rápidamente ese pequeño dolor no significo más que una molestia. Esa mujer estaba sorprendida, su puño se había sido frenado por un escudo metálico que apareció de la nada pero de todas formas quedó deformando al recibir el impacto, aproveche ese corto tiempo para crear otra rodela en mi brazo derecho y así quedé listo para el siguiente round en el cual ya no tendría tanta desventaja o eso era lo que pensaba, al poco rato volví a recibir golpes y aunque esta vez podía bloquearlos aun no podía realizar un contraataque, su velocidad aun le daba una clara ventaja sobre mí y yo consciente de esto sabia que lo mejor que podía hacer era retroceder.

Empecé a retroceder pero apenas di el primer paso hacia atrás mi espalda chocó con un muro.

“Estoy acorralado”

Aquella mujer vino hacia mí corriendo, dio un salto y luego estiro una de sus piernas hacia delante para atacarme, a lo cual tuve esquivarlo tirándome a un costado para darme una voltereta, rápidamente me levante y miré como su pierna había impactado al muro dejándolo con enormes rajaduras, prácticamente aquel muro a estaba punto de desplomarse por la patada que dio esa mujer desconocida, ella se apresuro en ponerse en guardia contra mí para después lanzarme su puño derecho al cual pude bloquearlo con mi brazo, luego lanzo su puño izquierdo al cual también pude bloquearlo pero ese golpe llego a mi brazo con gran fuerza y provocó de mi cuerpo se inclinara hacia atrás, aprovechando eso aquella mujer se dio rápidamente una vuelta para patearme el estomago mientras yo intentaba enderezarme pero al no ser tan rápido no me quedó opción más que usar mis brazos para proteger mi abdomen pero no sirvió de nada mi protección, logré bloquear su pie pero estábamos a corta distancia y ella al tener fuerza superior a la mía no le costó atravesar mi defensa golpeándome en el estomago y mandándome a volar varios metros atrás para luego terminar chocando con un poste de luz. Al impactar mi espalda con el poste sentí un gran dolor  pero por alguna razón mi boca no podía hacer ni un solo sonido, caí al suelo sentado con mi espalda apoyada al poste, lentamente intentaba ponerme de pie aunque con gran dificultad, el dolor se me estaba calmando rápidamente pero aun no estaba listo para seguir peleando.

Aquella desconocida se me acercaba caminando mostrando gran seriedad en sus ojos mientras yo me ponía en guardia a un afectado por el dolor y sin entender el porqué de su agresión, ella se preparaba para venir hacia mí a toda velocidad pero antes de que pudiera siquiera dar un paso fue interrumpida, el cachorro a la que ella llamo Ayari vino corriendo y se puso frente a su supuesta dueña para luego.

-  ¿Ayari?

-  Detente hermana, él no es uno de los cazadores.

Escuché una voz de la nada o eso creía antes de ver como el cachorro frente a mis ojos cambiaba su forma, empezó a ponerse en dos patas y poco a poco su figura cambio a la de un niño y al verlo quedé con los ojos bien abiertos y luego impulsivamente dije.

-  ¿Qué coño… como es qué?, alguien me puede decir que es lo que pasa que me estoy confundiendo cada vez mas.

El niño dio vuelta para verme con una sonrisa y después volvió dirigir su mirada a aquella mujer a la que llamó hermana para luego decirle.

-  Hermana, él es Masato Abukara, él fue quien estuvo cuidando de mi todo este tiempo.

-  (O.O) ¿Qué?, ¿él estuvo cuidando de ti?... y yo lo confundí con uno de los cazadores.

-  (u.u) No tienes remedio hermana,  a veces me pregunto por qué eres tan impulsiva, por eso es que ningún chico se te acerca.

Enfada la hermana de aquel niño agarró su mejilla con sus dedos para después jalarle y decirle.

-  Tu mejor no hables Ayari que todo esto es por tu culpa, si no te hubieras alejado de mi no te hubieras perdido y no tendríamos que haber pasado por esto.

-  Eso duele, por favor hermana perdóname, no fue apropósito de veras lo siento.

Ella dejó de jalarle la mejilla a su hermano para luego suspirar, dirigió su mirada hacia mí pero esta vez mostrando un rostro reflejando la vergüenza que sentía por haberme atacado.

-  Te llamas Masato Abukara ¿verdad?

-  Si, así me llamo.

-  Mi nombre es Yuzuki Nagase, quería pedirte disculpas por haberte atacado de esa forma, lo que sucede es que yo pensé que.

Con una actitud relajada digo.

-  Pensaste que yo era uno de esos cazadores ¿verdad?

-  …Si, ¡en verdad lo siento mucho!

-  Bueno ya entendí pero quisiera saber cómo fue que llegaste a la conclusión de que yo era uno de esos, cazadores, no recuerdo haber hecho algo para que me consideraras un enemigo.

En ese momento el niño llamado Ayari interrumpió para dar él la explicación.

-  Lo que sucede es que mi hermana quería saber si eras un humano normal, así que para probarte se acercó a ti bruscamente para ver tu reacción y como  rápidamente te hiciste a un lado ella creyó que no eras un humano común y corriente si no uno de los cazadores.

-  Entiendo, por eso su puño no se dirigió directamente a mi rostro sino a un costado.

La chica llamada Yuzuki me miró con enojo para decirme.

-  (ò.ó)Si sabias que el golpe no iba dirigido hacia tu rostro, ¿porqué te moviste?.

-  Tampoco me iba a quedar ahí paradote viendo como alguien intentaba atacarme ¿no?

-  Pero yo no quería atacarte, solo quería probar si eras un humano común y corriente, si te hubieras quedado quieto note hubiera hecho nada.

-  Y como querías que yo supiera tus intenciones, ¿acaso crees que soy un adivino?

-  No, pero…

-  No deberías atacar a alguien de esa forma solamente por sospechar que es un enemigo, deberías tener en cuenta que no todos aquellos que tenemos habilidades sobrehumanas podemos ser unos de esos cazadores y hablando de esos tipos me podrían explicar exactamente quienes son esos y también quien o mejor dicho ¿Qué son ustedes?

Ayari cerró los ojos un momento para sacar de su cuerpo una cola y dos orejas, luego abrió sus ojos para mirarme y responder mi pregunta pero antes de que él pudiera hablar su hermana lo interrumpe.

-  Espera Ayari ¿Qué estás haciendo?, te dije que no sacaras tus orejas cuando estemos frente a alguien.

-  Tranquilízate hermana, además él ya sabe que no somos humanos gracias a que tú también sacaste tus orejas y cola.

-  Emmm, Bueno, está bien, continúa.

El niño me mira para decirme.

-  Nosotros somos, Espíritus de lobo.

Algo confundido quedo callado por un momento para verlos ambos de pies a cabeza para analizar principalmente la forma de sus orejas y colas para luego decirle a Ayari.

-  … (O.o) ¿Lobo?, bueno ambos tienen rasgos de lobo, pero para mí sus orejas y colas mas se parecen a las de un perro.

Ayari intenta responderme pero su hermana Yuzuki lo interrumpe.

-  Eso es de suponerse, ya que nuestro padre es un espíritu de perro y nuestra madre es un espíritu de lobo.

No entendía muy bien a que se referían al decir espíritu pero imaginaba que seguramente así llaman los japoneses a las criaturas sobrenaturales así que solamente les seguí la corriente fingiendo que entiendo.

-  (¬.¬) Así que también hay cruce entre los espíritus, se oye algo raro, así que por eso cuando vi por primera vez a tu hermano me dio la impresión de que era un perro lobo.

-  La unión delo los espíritus de lobo y los de perro es algo completamente normal, ya que no tenemos muchas diferencia.

-  Entiendo, ¿ahora me podrían decir que es eso de cazadores?, que tanto oírlos mencionar esa palabra me dio interés por saber.

-  (u.u) Esa es información que no te concierne.

-  Por si ya lo olvidaste alguien me atacó dejándome un gran dolor en la espalda, también recuerda que en todo este tiempo quien estuvo cuidando de tu pequeño hermano, alimentándolo y teniendo que limpiar sus desechos, lo cual no es para nada agradable, quiero decir que por todo lo que me hicieron pasar merezco una recompensa y solamente les estoy pidiendo información aunque ahora que lo pienso mejor podría pedirles dinero, además eso es lo justo o no.

Yuzuki se quedó en silencio mostrando duda en su rostro, pensando en si decirme o no sobre algo de lo que no tenía ninguna idea, de pronto bruscamente dirige una mirada seria hacia mí para decirme.

-  Está bien, te lo diré pero escucha bien porque no lo repetiré.

Poniéndome atento esperaba la historias de estas extrañas criaturas con gran interés.

-  Ayari y yo vivíamos en una aldeas escondida en el bosque en la cual solamente Vivian espíritus de lobo de una forma pacífica, pero hace poco esa paz desapareció cuando escuchamos noticias de que varios de los nuestros habían sido atacados a los alrededores  por humanos con poderes sobrenaturales que se los llevaban a un lugar desconocido, algunos que habían logrado escapar de ellos decían que atacaban a cualquier espíritu que encontraban y por eso se les dieron el apodo de cazadores, varias familias habían decidido irse a las ciudades humanas para vivir escondidos y nuestra familia no fue la excepción.

-  Buen resumen, pero exactamente quiénes son esos cazadores.

-  Ya te lo dije, son humanos con poderes sobrenaturales.

-  ¿Cómo los que yo tengo?

-  A pesar de que me sorprendí al ver que podías crear objetos de la nada tu habilidad no es nada comparado a lo que hemos oído, aun teniendo esa habilidad, tú fuerza y velocidad es muy inferior a la nuestra y creo que ya te diste cuenta, en cambio según lo que escuché esos cazadores tienen fuerza sobrehumana incluso mayor a la nuestra.

-  Emmm, creo que no escuché bien, ¿me pareció o dijiste que esos tipos tenían mayor fuerza que ustedes?

-  Eso fue lo que dije.

“¿Hay tipos con mayor fuerza que esta mujer?, mejor dicho espíritu. Sería demasiado malo si uno de esos tipos va tras Karen”

-  Estamos corriendo peligro así que no nos podemos permitir confiar en un desconocido y esa también fue la razón por mi impulsivo ataqué.

-  Bueno, estando en esa clase de situación creo que yo haría lo mismo, no exactamente atacar a alguien pero si estaría atento con quien hablo.

-  Ahora que tus preguntas ya han sido respondidas, ¿Ya estas satisfecho?

-  Si.

-  Bien, nosotros tenemos que irnos, no debemos quedarnos en un solo lugar demasiado tiempo así que, adiós.

Ambos hermanos se alejaron caminado hacia una dirección desconocida, había aprendido nuevas cosas sobre este mundo nuevo aunque había quedado aun con la impresión por haberme enterado que existían tales clases de criaturas en este mundo, pensando en lo que me había sucedido caminaba lentamente en la noche para volver a mi apartamento. Al llegar vi a un señor con un paquete en las manos frente a mi puerta, al preguntarle qué era lo que quería me dijo que había llegado un paquete para mi, simplemente lo recibí, firme un papel con la primera cosa que se me ocurrió y luego ingresé a mi habitación abriendo la puerta con las respectivas llaves, dejé el paquete encima de la pequeña mesa que tenia, con apariencia cansada caminé hacia el baño para echarme agua y al volver digo murmurando.

Pero que tal día el que tuve, acabo de conocer a unas criaturas extrañas y una de ellas por poco me destroza a golpes, aunque aprendí  algo más de este mundo cuando escuché sobre esos tipos a los que llaman cazadores pueden llegar a ser muchos más fuertes que esa criaturas llamadas espíritus sentí un pequeño escalofrió, espero que no tenga que enfrentarme a uno de esos.

Escuché una voz que se dirigía hacia mí pero como estaba distraído, no le tomé mucha importancia.

-  Parece que tuviste una mala caminata, muchacho.

-  Si, creí que me haría bien salir a caminar pero como vez al final quedé más molido que… ¿Qué rayos?

Voltee mi cabeza para ver de donde provenía esa voz que me había respondido pero no había nadie, estaba solo buscando con la mirada.

¿Estaré alucinando?

-  No, lo que estas escuchando es real.

Esas palabras me asustaron provocando que retrocediera hasta chocar mi espalda con uno de los muros de mi apartamento, tenía miedo de no saber qué era lo que estaba pasando, pero al poco tiempo me di cuenta que aquella voz ya la había escuchado antes.

-   Escúchame muchacho, primero cálmate y mira encima de tu mesa.

Lentamente y aun con duda miro mi mesa para ver que en ella estaba solamente el paquete que había recibido, me acerqué con cuidado para abrirlo lentamente, en cuanto le quite todo el papel vi un objeto extraño, algo parecido a un brazalete con dos tiras de tela trenzada pero con una especie de cristal rojo en forma circular cubierto por un metal dorado de la misma forma de las cuales se sujetaban las dos tiras de tela trenzadas. Lo sujeté para alzarlo lentamente admirando su forma pero repentinamente el cristal brillo y escuché de nuevo la voz.

-  ¿Cómo estas muchacho?

Solté el brazalete por el susto que tuve y me alejé dos pasos.

-  Niño, ten más cuidado con este objeto que es muy valioso.

-  (o.O) ¿Niño?... Maldita sea vejete, podrías haberme avisado que me enviarías algo como eso para no asustarme, y por cierto ¿Qué se supone que es esto?, ¿un nuevo tipo de celular?, la tecnología japonesa sí que es rara.

-  En primer lugar no me llames vejete.

-  Esta bien Perdóname pero recibí un gran susto gracias a tu regalito.

-  Bueno, volviendo al tema principal, quiero decir que este objeto por el que estoy hablando no está para nada relacionado con la tecnología ya que yo mismo lo hice usando mi magia.

-  ¿Enserio?

-  Si, justo como sugeriste con este objeto podremos estar en contacto y sin peligro de que mi hermanastro Toshiro me detecte, de esta forma podre avisarte cuando Karen esté en peligro y ayudarte de una manera menos riesgosa.

-  Vaya esto sí que tiene muchas ventajas, y lo mejor es que no tengo que pagar por llamada, pero me parece que dos tiras de tela no podría evitar que alguien me la arrebatara sin esfuerzo, ¿no pudiste haberle puesto algo más seguro?

-  Créeme esas telas parecen ser débiles pero recuerda que las apariencias engañan, si no me crees acerca ese brazalete en tu muñeca y no hagas nada.

Obedecí a Hiroto, cogí el brazalete y lo acerqué a mi muñeca pero estando a unos poco centímetros de mi piel las dos tiras de tela empezaron a moverse lo cual me sorprendió e hizo que soltara el brazalete, pero aquel no cayó en lugar de eso sus dos tiras de tela se movieron rapidamente rodeando mi muñeca y formando ellas solas un nudo.

-  (O.O) Wow, eso sí que es muy útil.

-  Ahora intenta quitarte el brazalete.

-  ¿Pero para qué?

-  Solo haz lo que te digo.

-  Bieeennn.

Con mis dedos intento desatarme aquel objeto pero en cuanto jalo una tira con la intención de quitármelo no se movía ni un poco, parecía estar pegado con algún pegamento muy resistente, poco a poco iba aplicando más fuerza para quitármelo pero las tiras de tela seguían intactas, no se había desatado ni un solo centímetro.

-  Si que está bien pegado esta cosa.

-  Como podrás ver ese brazalete no podrá serte quitado tan fácilmente ya que le puse un hechizo con el cual solamente yo seré el único que te lo podrá quitar.

-  ¿Entonces tendré que tener pegado esto en mano todo el día?, ¿incluso para cuando tenga que bañarme?

-  Bueno, en ese caso me puedes avisar para que te lo quite, pero ese brazalete nos mantendrá en contacto así que te recomiendo que lo tengas contigo en todo momento ya que este brazalete podría salvarte la vida ante un peligro como el que tuviste hoy con ese espíritu.

-  ¿Te refieres a la mujer que me atacó hace un rato?

-  Exactamente. Le diste una buena pelea pero parece que tu miedo hacia lo nuevo no te dejo tomar la ofensiva, tal vez si hubieras decidido atacarla el resultado hubiera sido otro.

-  Yo no tuve miedo, simplemente estaba más concentrado en mi defensa ya que esa mujer era demasiado rápida ¿y acaso no viste la fuerza que tenia?, dejó un gran hoyo al poste que golpeo y no mostró dolor alguno.

-  Si vi el potencial de aquel espíritu pero debes saber que la fuerza y la velocidad no son factores que garanticen la victoria, tu deberías saberlo más que nadie, además la velocidad no es de mucha ayuda cuando tu oponente sabe donde piensas atacarlo.

-  Pero aun así teniendo esa habilidad podía esquivar sus golpes pero con gran dificultad, sentí como me rozaban sus puños, varias veces estuve muy cerca de recibir un golpe que fácilmente me hubiera dejado inconsciente.

-  Eso es porque tuviste miedo y no lo niegues, a pesar de que puedes esconder tu miedo no puedes evitar sentirlo y eso es lo que te perjudico, tenias miedo de recibir un golpe y eso no te permitía moverte con total libertad, ahora respóndeme algo, en aquel momento en el que estabas luchando ¿no sentiste tu cuerpo más pesado de lo normal?

-  Por supuesto que no, estaba igual que siempre.

-  (¬.¬) ¿Enserio?

-  Si, enserio.

Hiroto tenía su mirada fija en mi como intentado decirme que no me creía, mejor dicho no intentaba, él afirmaba que  yo estaba mintiendo.

-  Oye, ¿puedes dejar de mirarme así?

-  Solo si me dices la verdad.

-  Pero si ya te lo he dicho.

-  No lo has hecho.

-  … (-.-) Está bien, si tenía miedo ¿ya estas contento?, ¿acaso también puedes leer mi mente?

-  No puedo leer tu mente, pero te conozco como la palma de mi mano.

-  Si tanto me conoces entonces no era necesario hacerme decir que si tenía miedo, si de todas formas ya lo sabías.

-  Para que una persona pueda superarse a sí misma tiene que reconocer sus errores y debilidades o nunca lograra escapar de su estancamiento, y por eso quería que reconocieras que tenias miedo y no debería avergonzarte decir eso, todo humano siente miedo a algo, pero con la ayuda de la concentración ese miedo no tendrá más efecto en ti.

-  Si dices que todo humano tiene miedo a algo entonces es imposible evitarlo, lo mejor es solamente esconderlo.

-  Aunque escondas tu miedo este terminara consumiéndote evitando que puedas pensar con claridad, es verdad que el miedo no se puede eliminar pero si puedes olvidarlo, si sientes miedo por algún obstáculo simplemente deja de pensar en lo que temes de ese obstáculo, en lugar de eso piensa como podrías superarlo.

-  Es fácil decirlo

En esa noche me quede hablando con Hiroto sin fijarme de la hora y lo tarde que era, no podía evitar preguntarle cosas para mi desconocidas que para él era normales y por alguna razón disfrutaba conversar con ese anciano algo que nunca había hecho ya uqe mis padres paraban siempre ocupados y nunca tenían tiempo para mí, con cada día que pasa y cada suceso legre que vivo en este desconocido mundo me siento cada vez más feliz de haber decidió quedarme.

Avances  
  En estos momentos estoy trabajando en el capitulo 2 de PivCity  
Hoy habia 1 visitantes (1 clics a subpáginas) ¡Aqui en esta página!
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis